Desde Océano Alfa como Asociación Conservacionista, queremos, según nuestra experiencia, reconocer el valor de las reservas marinas como la mejor herramienta de protección y conservación de los recursos naturales y pesqueros.
En base al contenido del proyecto de normalización de Reservas Marinas consideramos que la tipología de las reservas marinas, tiene que quedar perfectamente definida, de manera que todos los usuarios y la ciudadanía en general entienda que es un espacio creado con el objetivo de mantener a un sector de la sociedad profesional, el sector de la pesca tradicional artesanal, proteger los recursos naturales y permitir actividades no lesivas controlándolas y restringiéndolas de manera acorde al espacio privilegiado en el que se desarrollan.
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Por ello consideramos fundamental que:
- Dicha tipología tenga nombre y apellidos, dejando así claro, si es una reserva marina de interés pesquero o no, y evitar así el desconcierto del visitante ante la práctica de una pesca tradicional y artesanal.
- Consideramos de vital importancia continuar y mejorar la vigilancia y contar con el sector de la pesca artesanal y del buceo recreativo como una ayuda disponiendo de la información más allá de las normativas, información visible para la ciudadanía en los lugares en los que haya reservas marinas.
- Solicitamos herramientas, protocolos, métodos de actuación desde la administración que permitan una mayor colaboración de todos los sectores en la lucha contra el furtivo, como ayuda a la vigilancia.
Esta ayuda voluntaria redundaría si cabe, en una mayor sensibilización por parte de los sectores, actuación que los sectores han venido ofreciendo en los últimos años dentro del marco de distintos proyectos como el de PESCARES. - Solicitamos más medidas de control y de calidad para todos los sectores y con su participación, medidas acordes al valor de nuestras reservas marinas, mediante actuaciones similares a los criterios de buceo recreativo responsable, convirtiendo estas medidas aparentemente restrictivas en un estándar de calidad posiblemente el más alto del mundo en espacios acuáticos protegidos, que nos ayuda a diferenciar y poner en valor la actividad del buceo recreativo en estos espacios privilegiados.
- Solicitamos que continúen las medidas restrictivas de la pesca recreativa con un mayor control de su actividad, evitando actuaciones que puedan alterar su convivencia con el sector de la pesca profesional artesanal.
Entendemos, que para que ello sea posible, de realizarse dentro de las reservas marinas, se realice mediante la modalidad de pesca sin muerte y suelta, pudiendo pescar fuera de la misma, beneficiándose del efecto reserva. - Solicitamos que las actividades que alteren por sus características técnicas o de ocio, la tranquilidad y el sonido ambiente de una reserva marina se desarrollen fuera de las mismas, como el empleo de motos de agua o embarcaciones de turismo que aún cumpliendo el “paso amable” empleen megafonía o música como atractivo turístico.
- Agradecemos y aplaudimos la prohibición de cualquier otro tipo de pesca profesional o modalidad como la pesca de arrastre.
- Agradecemos y aplaudimos la prohibición de la pesca submarina en las reservas marinas, y destacamos, tras la reciente prohibición de la pesca submarina en sus aguas interiores, la rápida recuperación de la reserva marina de interés pesquero de Levante de Mallorca Cala Rajada.
- Solicitamos mayores sanciones y eficiencia en su aplicación en la lucha contra el furtivo y ante las irregularidades de cualquiera que incumpla la normativa que las regula.
- Solicitamos asimismo la ampliación de las actuales reservas marinas y la creación de más, sean de interés pesquero o no.
Las reservas marinas con un recorrido de más de treinta años, son para nuestro sector, como observadores en inmersión y para los centros que operan día a día como controladores de calidad en las reservas marinas, una experiencia de éxito no solo por sus excelentes resultados, sino por el ejemplo de convivencia entre la pesca artesanal y demás actividades no extractivas.
Sin normativa, vigilancia, control, seguimiento y sanciones desde las administraciones, y prohibición o restricción de las actividades dañinas se pone en riesgo la excelente evolución de nuestras reservas marinas y la convivencia de todos, tanto de los sectores que operan en ellas, como de la ciudadanía nacional o internacional que se acerca o exige la existencia de estas figuras imprescindibles para el futuro de todos.
Para todos estos puntos ofrecemos todo nuestro apoyo y comprometida colaboración
